En el centro capilar Rueber conocemos el momento por el que están pasando quienes que se encuentran en un proceso oncológico. Por experiencia, sabemos que hay personas que desarrollan efectos secundarios al tratamiento de quimioterapia, mientras que otras no. La aparición de estos efectos varía dependiendo del tratamiento, aunque pueden diferir entre pacientes que hayan recibido exactamente el mismo tratamiento.

Efectos secundarios más comunes

Los efectos secundarios más comunes que suelen padecer los pacientes sometidos a un tratamiento de quimioterapia son:

  • Fatiga.
  • Disminución del nivel de células de la sangre.
  • Náuseas y vómitos.
  • Diarrea.
  • Estreñimiento.
  • Alteración de la mucosa bucal.
  • Pérdida del apetito.
  • Cambios del ciclo menstrual en las mujeres.
  • Alteraciones en el cabello, piel y uñas.

En este artículo nos vamos a centrar en las alteraciones en el cabello y en la piel.

Alteraciones en el cabello causadas por tratamiento de quimioterapia

La caída del cabello es un efecto secundario habitual en los tratamientos por quimioterapia. Está causada por la acción de distintos medicamentos que dañan el folículo piloso causando la caída del cabello.

Cuando el tratamiento produce alopecia, la caída del pelo es generalizada, no solo afectando al cuero cabelludo, sino también a otras partes del cuerpo como las axilas, brazos, piernas, cejas y pubis. Algunos tratamientos producen una caída del 100% y en otros, el porcentaje de caída es menor.

La alopecia producida por la aplicación de quimioterapia es reversible siempre, sin embargo el cabello puede crecer con características distintas a las que tenía antes de someterse al tratamiento.

Antes de la caída

Antes de que empiece a caerse el cabello se recomienda emplear siempre un champú hidratante para el cuero cabelludo. Al mismo tiempo debe evitarse el uso de secadores o planchas para el cabello, mejor secar suavemente con una toalla.

Se desaconseja usar productos químicos.

En muchos casos la caída del cabello es una de las principales preocupaciones para los pacientes oncológicos, dado que el aspecto personal es importante para sentirse bien consigo mismo. Si el paciente no se encuentra a gusto con su imagen puede crear inseguridad y tender a aislarse. Además, la pérdida de cabello hace más patente la enfermedad, tanto para el paciente como para su entorno.

Una opción recomendable es el uso de prótesis capilares o pelucas. Si el paciente se decide por esta alternativa, se aconseja elegir la prótesis capilar o la peluca antes de que empiece la caída de cabello, unas semanas antes, siendo más sencillo elegir el color y el estilo similar al habitual, ya que en estos casos lo que el paciente acostumbra a desear es conservar su imagen y no realizar cambios.

Cuando ya se ha caído

Muchos pacientes se sienten deprimidos y enojados por la caída del cabello. En estos casos resulta útil hablar con otras personas que hayan sufrido la pérdida del cabello durante el tratamiento del cáncer. También es importante hablar francamente con los familiares cercanos para canalizar los sentimientos.

Al caerse el cabello, el cuero cabelludo queda expuesto a la acción de la radiación UV. Si no se ha optado por el uso de una peluca o una prótesis capilar, se debe proteger la cabeza al salir al exterior, ya sea usando sombrero o pañuelo, ya sea aplicando protección solar. En invierno es fundamental cubrir la cabeza para evitar una pérdida excesiva de calor corporal. Aquí puedes ver nuestros pañuelos Pink Mama, creados exclusivamente para mujeres que están bajo tratamiento oncológico.

Independientemente de que el paciente se decante por un pañuelo, una peluca o una prótesis capilar, debe prestar una atención especial al cuero cabelludo. Nosotros proponemos un cuidado en 3 fases:

Durante la quimioterapia

Fase 1: renovación celular y desintoxicación, mediante el uso de la crema Iboderm, el champú Dermopel y las ampollas Equitox.

Tras finalizar las sesiones de quimioterapia:

Fase 2: durante 2 meses, estimulación: crema Iboderm, champú Equiderm y tónico R-Activo 1%.

Fase 3: durante 3-4 meses, nutrición: crema Iboderm, champú Proteínas pH 5.5 y ampollas Vasodil Minol.

Cuando vuelve a crecer

Después de la quimioterapia, el cabello vuelve a crecer siempre. Cuando nace, puede hacerlo con una textura diferente a la original (liso si antes se tenía rizado) o con más canas.

Cuando un cabello crece a través de una piel cuidada durante el proceso oncológico, lo hace más fuerte y sano.

Es conveniente evitar el uso de tintes para el cabello como mínimo hasta 3 meses después de haber finalizado el tratamiento.

Alteraciones en la piel causadas por tratamiento de quimioterapia

La quimioterapia puede dañar las células de crecimiento rápido de la piel y de las uñas, conllevando problemas de sequedad de la piel, prurito, enrojecimiento o descamación.

Algunos pacientes adquieren sensibilidad al sol, lo que provoca que se “quemen” fácilmente con la exposición solar.

Controlar los las alteraciones de la piel

Durante el tratamiento, se recomienda mantener la piel siempre hidratada. Para ello los jabones basados en avena, suaves en su composición, están especialmente indicados.

Si el paciente tiene una piel particularmente seca, deberá evitar los baños calientes prolongados dado que resecan todavía más la piel. Utilizar cremas hidratantes a diario, será fundamental para mantener el buen estado de la piel. Beber mucha agua también ayudará a mantener la piel húmeda y sana.

Si la persona tiene pruritos, debe evitar rascarse. Puede aliviar el picor aplicando un gel refrescante y calmante.

Rueberclinic para pieles afectadas por la quimioterapia

Dentro de la gama de productos cosméticos Rueberclinic, se encuentra una línea sin parabenes expresamente pensada para zonas afectadas por la quimioterapia, como pueden ser el cuero cabelludo, cara, cuerpo y uñas.

Para la piel facial y corporal disponemos de nuestro jabón balsámico Terlactine, con extracto de avena, pH 5.5, hidratante y dermoprotector, que calma y evita picores corporales.

También ponemos a disposición de nuestros clientes cremas y geles de máxima hidratación que dotan a la piel los elementos contrarrestantes a los efectos de la quimioterapia.

  • Aqua-C 24h: Crema corporal hidratante, nutritiva y vitalizante. Crema de alto poder hidratante que forma una película sobre la piel y la mantiene hidratada, evita la pérdida de agua y la exfoliación de la piel, aportando un tacto muy suave.
  • Ureavit: Crema facial y corporal de alta hidratación para pieles muy secas. Crema hidratante a base de urea y vitaminas con propiedades regeneradoras de capilares y tejidos. Da elasticidad a la piel y previene la formación de estrías.
  • Aloecare Gel: Gel facial y corporal de Aloe Vera 100% puro. Gel Hidratante y protector que suaviza la piel, para después del baño. Actúa sobre irritaciones, quemaduras, dermatitis, largas exposiciones solares, etc. Evita la exfoliación de la piel.

Si necesitas saber más sobre nuestras soluciones capilares oncológicas o tienes cualquier otra duda sobre los servicios de Rueber, ponte en contacto con nosotros. Estaremos encantados de atenderte.